José Francisco López y Segarra
El Foro Europeo para la empleabilidad de los reclusos (EOEF) acaba de celebrar su último encuentro en Escocia. Patim ha participado de forma activa en este congreso internacional donde se han puesto en común distintas iniciativas en torno a tres ejes de actuación: el empleo al salir de prisión, la reducción de la reincidencia y la promoción de un crecimiento europeo que incluya la realidad de estos colectivos.
Representantes de gobiernos y organizaciones no gubernamentales de Estados Unidos, España, Portugal, Grecia, Alemania, Italia, Holanda, Francia, Hungría, Gran Bretaña y Escocia se han reunido en Edimburgo para poner en común buenas prácticas y analizar de forma conjunta distintos proyectos que se han puesto en marcha. Uno de argumentos que han generado un mayor consenso es la importancia de visibilizar las acciones para fortalecer sus resultados. Además, se ha remarcado la necesidad de fortalecer la etapa de formación, especialmente en los presos más jóvenes, y el contacto con empresarios para romper prejuicios.
El presidente de Patim expuso la experiencia del centro de empleo de esta entidad que, durante los últimos dos años de crisis económica, ha logrado 80 puestos de trabajo, con una duración que oscila entre los cuatro y doce meses. “Las ayudas económicas para el empresario resultan útiles como herramientas para la contratación pero es necesario incentivar la creatividad y la determinación de las personas beneficiarias de nuestros servicios para fomentar su capacidad de convertirse en emprendedores” explica.
José Francisco López y Segarra y Javier Grau
¿Cómo se pueden superar los estereotipos que limitan el acceso al mercado laboral?
Generando confianza. En estos momentos da la sensación que el empresario está impermeabilizado. Resulta muy complicado conseguir algo más que buenas intenciones cuando hablamos con ellos. Es normal, la crisis ha cerrado muchas puertas pero seguimos intentando que otras permanezcan abiertas. No tenemos ninguna duda de que la mejor forma para poder quitar cualquier etiqueta es conocer a las personas. No pedimos que se contrate a colectivos en riesgo de exclusión sino a personas formadas para trabajar y cuyo perfil se adecua a las necesidades que demandan. Desde nuestra entidad hacemos un seguimiento de todos los casos pero su trabajo diario es la mejor garantía ante el empresario.
¿Hacia dónde se pueden dirigir nuevas iniciativas?
Desde hace tiempo intentamos que las personas que demandan nuestros servicios no se centren únicamente en buscar un trabajo en las empresas. Intentamos que vayan un poco más allá. Que se conviertan en sus propios jefes. Que consideren de forma seria la posibilidad de ser emprendedores. Una alternativa que pensamos que está poco explotada y rentabilizada aunque puede dar buenos resultados.
¿Y qué papel pueden desempeñar las entidades sociales para cambiar estos resultados?
El Tercer Sector somos la vía que debe de impulsar el ritmo en las administraciones para que dicten normativas que creen trabajo para nuestros colectivos en exclusión. Conocemos la realidad de primera mano, sin intermediarios, y podemos estructuras respuestas conjuntas.
José Francisco López y Segarra, Antonio Beltran y Javier Grau
Hace varios años que Patim promueve la creación de un Observatorio europeo de sistemas penitenciarios. Durante su estancia en Edimburgo, visitaron la prisión de Polmont ¿qué le ha aportado esta experiencia?
Que la privación de libertad es igual de dramática en todo el mundo pero puede desdramatizarse en la medida que esté acompañada de buenas estructuras y un buen equipo profesional y humano. Podría decir de Polmont tiene un alto grado de transparencia, muy diferente a otras visitas que hemos realizado tanto en España como en otros países de la Unión Europea.
¿Cómo valora los resultados de este encuentro internacional?
Ha sido una experiencia muy positiva. Y no sólo porque, como miembros de EOEF, hemos podido afianzar la relación con otras organizaciones con las que habíamos coincidido en anteriores ediciones sino porque nuestra participación ha sido también muy activa tanto en este seminario como en la investigación “What works” (Qué funciona), que lleva a cabo el Centro para la inclusión económica y social (CESI). Poner en común y consensuar una visión unificada entre entidades de distintos países refuerza el trabajo que desarrollamos individualmente y promueve la transferencia de productos.